blackandwhitesisters

Espejo, Cap. 93 En la Tierra… -¿En  serio es necesario todo esto? -¡Por supuesto! ¡Tienes que estar perfecta! –exclamó, sonriente, Donna-. Fionna solo suspiró y dejó que esos desconocidos continuaran acicalándola. Se le hacía raro tener a una persona en cada mano, haciéndole la manicura, una peinándola junto a otra que comentaba si tal peinado iría mejor o peor por su forma de cara y vestido, y otra más discutiendo el maquillaje con su madre. No entendía a qué tanta dedicación; se había puesto ya un vestido, ¿no era suficiente para arreglarse? -

Espejo, cap. 92 En Aaa… Fionna se miró en el espejo del baño, sin poder parar de sonreír. Volvió a alborotarse el pelo con la toalla, la dejó a un lado y la substituyó por el cepillo, empezándose a librarse de los enredos. Sentía los nervios de un gran acontecimiento acercándose, y le daban ganas de ponerse a gritar como cuando le explicó a Cake que Marshall iba a acompañarla. Se había quedado sola durante un tiempo cuando la noche anterior el vampiro se había acabado marchando para que ella pudiera descansar, y ella no podía ni intentar dormir de la emoción. L

Espejo, cap. 92 En Aaa… Fionna se miró en el espejo del baño, sin poder parar de sonreír. Volvió a alborotarse el pelo con la toalla, la dejó a un lado y la substituyó por el cepillo, empezándose a librarse de los enredos. Sentía los nervios de un gran acontecimiento acercándose, y le daban ganas de ponerse a gritar como cuando le explicó a Cake que Marshall iba a acompañarla. Se había quedado sola durante un tiempo cuando la noche anterior el vampiro se había acabado marchando para que ella pudiera descansar, y ella no podía ni intentar

Espejo, cap. 91 En la Tierra… Marshall bajó a desayunar reprimiendo un bostezo, se había despertado sin motivo aparente a una hora que un madrugador consideraría tarde, y no había habido forma de volver a quedarse dormido, así que se había obligado a levantarse y empezar el día. Aunque el recuerdo del porqué se había ido a dormir ya de madrugada le robó una sonrisa; había echado de menos esos momentos en los que lo único que importaba eran ellos dos y las risas que compartían. Se sentó en la mesa casi sin darse cuenta que su compañ

Espejo, cap. 90 En Aaa.. El insistente ruido del teléfono despertó a Fionna, quién se acurrucó a lo que estaba abrazando, esperando en vano que eso apaciguara el volumen del irritante sonido. -Fi… cógelo ya… -Dijo Marshall, adormecido, justo un segundo antes de que sonara el contestador automático en la otra línea y el silencio volviera a gobernar el ambiente-. La humana sonrió ante la tranquilidad, antes de relacionar quien había hablado, y abrir los ojos poco a poco, extrañada, dándose cuenta que no estaba acurrucada a una almohada. Pudo notar como

Espejo, cap. 89 En la Tierra… Patrick B. Gumball parecía el único que no entraba nervioso por la nota de los exámenes. Lo único que le inquietaba mínimamente eran las posibles burlas de sus amigos o los cotilleos y etiquetas de Lucy. Pero no podía dejar entrever su sentimiento de presa fácil, o sus compañeros se convertirían en depredadores. En la primera hora, literatura, la mayoría de la clase se sorprendió al ver que la profesora se acercaba con una sonrisa y le entregaba el examen con un nueve. Rápidamente todos supusieron que había copiado

Espejo, cap. 88 En Aaa… Cake despertó a Fionna temprano ese viernes para ir a comprar las telas para el vestido a pesar de las protestas de la humana y sus sugerencias de ir más tarde. La gata la levantó a la fuerza, y casi le embutió el desayuno en la boca para meterle prisa. La rubia acabó rindiéndose y aceptando que no podría continuar en los brazos de Morfeo, así que se aseó y se vistió exasperadamente lento como venganza. Una hora después del alba, salieron caminando de la casa del árbol sin pausa pero sin prisa, comentando banalidades. Al fin ll

Espejo, cap. 87 En la Tierra… Marshall entró en el instituto, pasando mayormente desapercibido menos por un par de miradas que no reconocían a ese chico con aspecto de rockero como alguien invisible; pero rápidamente la atención se dispersaba y su imagen volvía a ser una entre todos. Las clases transcurrieron, por lo general, tranquilas, excepto quizás algún alumno que había sido pillado intentar copiar en un examen. La tensión se respiraba por todas partes en las aulas por ser el último día de exámenes y los alumnos no se fijaban en nada más q